El presidente Andrés Manuel López Obrador estuvo ayer, casi con certeza, por última vez en Veracruz. Al menos, por última vez con la investidura.

Quiero pensar que algún día, como un ciudadano, volverá a ésta, su segunda casa.Inauguró el Centro Cultural Leyes de Reforma, un tributo a Benito Juárez, quien asentó su presidencia en el Puerto de Veracruz y desde ahí promulgó el marco legal de la Segunda Transformación de México.

El acto inaugural de este domingo, desde luego, terminó siendo un pretexto para atestiguar su última gira de trabajo en tierras veracruzanas.

Cantándole la canción “Amigo”, sabiendo que nos estábamos despidiendo de él, que estamos viviendo las últimas jornadas de su Presidencia, fue inevitable vernos asaltados por la nostalgia, por la tristeza de ver a nuestros caminos separarse.

El próximo lunes será su último día como Presidente de la República y habrá acabado un sexenio glorioso para México, pero hay algo innegable en esta despedida: se va pero se queda.

Las noticias de hoy en la mañana transmitieron una nota en vivo desde la explanada principal de la sede del Instituto Nacional Electoral: el acto cívico que marcó el inicio del proceso electoral de para renovar el Poder Judicial.

Una noticia aparentemente sin conexión con la partida del presidente Andrés Manuel, pero que, en realidad, tiene todo qué ver.El domingo 1 de junio, cuando acudamos a las urnas a elegir, por primera vez en más de 200 años de vida independiente, a nuestros primeros Ministros, Magistrados y Jueces, estaremos poniendo en práctica uno de los muchos legados del presidente AMLO.

La huella de estos seis años en las instituciones mexicanas durará para siempre.

El nuevo rumbo que tomó el país bajo la Presidencia de AMLO marcará el destino futuro de la Nación. Los éxitos de Andrés Manuel son los éxitos de un pueblo que está decidido a salir adelante.

Por eso es muy oportuno despedirnos de Andrés Manuel sabiendo que no le decimos adiós, sino: ¡hasta siempre!*Diputado local. Presidente de la Junta de Coordinación Política.